Las múltiples experiencias, trayectorias, perfiles distintos y, sobre todo la diversidad de pensamiento, nos permiten disfrutar de un entorno más abierto y dinámico, que así mismo nos proporciona información más completa para la toma de decisiones sobre nuestras prioridades de negocio.
Gestionar equipos diversos es también un desafío, nos interpela a apreciar el valor e importancia de cada uno. La diversidad ya no es solo algo conveniente, sino que se ha convertido en un requisito necesario para que cualquier grupo de trabajo sea más eficiente, innovador y ágil.
Si queremos triunfar en este entorno en constante cambio, necesitamos de estos equipos, que nos harán más fuertes como grupo y aportarán valor añadido a cualquier proceso creativo, para así alcanzar nuestros objetivos comunes.
La diversidad solo suma si creamos un entorno inclusivo. No tiene solo que ver con políticas, sino más bien con la forma en que integramos la diversidad en la cultura de nuestra organización, como la valoramos y le damos lugar.
Un entorno inclusivo y seguro no se consigue de un día para otro. El proceso consiste en una serie de pequeñas acciones, formas de hablar y actuar con respecto a aquellas personas que percibimos como diferentes de nosotros.
Se trata de una intención constante que culmina con la creación de una cultura inclusiva que se consolida con el tiempo.
Es por ello, que hemos diseñado 5 principios claves para guiarnos en ese camino:
Sabrina Frete Domínguez, Responsable de Comunicaciones en COA
Romina Rodriguez Distante, Gerente de HR en COA
Error: Formulario de contacto no encontrado.